Apple ha enfrentado múltiples desafíos en su intento de desarrollar un módem 5G propio, lo que ha resultado en un fracaso hasta ahora1. La compañía subestimó la complejidad y los desafíos técnicos de la tarea, y carecía de liderazgo global para guiar a los diferentes grupos de desarrollo en Estados Unidos y en el extranjero1. En lugar de introducir módems personalizados de Apple en los iPhone de este año, como se había planeado originalmente, los ejecutivos de Apple tuvieron que retrasar los planes hasta los modelos de 2024, pero luego se dieron cuenta de que ese objetivo tampoco era posible1. Por esta razón, Apple extendió su acuerdo de módems con Qualcomm, que habría expirado a fines de este año, solo días antes del anuncio del iPhone 151.
El prototipo del módem 5G de Apple resultó ser demasiado lento y propenso a sobrecalentarse, lo que lo hizo inutilizable9. Además, la falta de comunicación entre los equipos de ingeniería y la falta de liderazgo global también contribuyeron a los retrasos y fracasos en el desarrollo del módem13. La complejidad del desarrollo de un módem de radio, que debe conectarse a redes inalámbricas en todo el mundo con ligeras variaciones en las tecnologías 4G y 5G, fue subestimada por la dirección de Apple13.
A pesar de los desafíos, Apple no ha abandonado por completo sus esfuerzos para desarrollar un módem 5G propio. La compañía ha extendido su acuerdo de suministro de módems con Qualcomm hasta 20262, lo que le da tiempo para abordar los problemas y mejorar su tecnología. Sin embargo, los informes sugieren que 2025 podría ser el momento más temprano en que la tecnología de Apple esté lo suficientemente avanzada como para reemplazar a Qualcomm9.
En resumen, Apple ha enfrentado dificultades significativas en el desarrollo de su propio módem 5G, lo que ha resultado en retrasos y fracasos en sus planes originales. La compañía ha extendido su acuerdo con Qualcomm y continúa trabajando en su tecnología de módems, pero aún no está claro cuándo podrá lanzar un módem 5G propio y exitoso.